El viernes 26 de julio comenzó oficialmente uno de los eventos deportivos más esperados del año: los Juegos Olímpicos. Esta vez, la sede es París y por primera vez la inauguración se realizó fuera de un estadio. El río Sena fue el escenario de la ceremonia inaugural y más de 6000 atletas de todas partes del mundo desfilaron por sus aguas. Además, hubo varios tributos a la ciudad y shows musicales de la mano de Lady Gaga y Céline Dion, quien tuvo un regreso triunfal y cantó junto a la Torre Eiffel.
Quienes también viajaron a París y dijeron presente en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos, fueron los reyes de los Países Bajos, Máxima y Guillermo Alejandro. Este sábado, la pareja real y sus dos hijas mayores, las princesas Amalia y Alexia, visitaron la villa olímpica de su país y tuvieron una animada jornada junto a sus atletas.
Si bien algunas disciplinas arrancaron a disputarse el miércoles 24 de julio, los Juegos Olímpicos arrancaron oficialmente el viernes, luego de la ceremonia inaugural que duró casi cuatro horas. Este sábado, varios deportistas salieron en búsqueda de sus medallas y algunos de ellos recibieron una visita especial. Desde la cuenta oficial de Instagram de la casa Orange, compartieron imágenes del encuentro de la familia real con los atletas neerlandeses en la villa olímpica y una vez más todos se sorprendieron al ver a una reina “fuera de protocolo”.
Los reyes de los Países Bajos decidieron apoyar personalmente a sus atletas. Visitaron la villa olímpica -el lugar donde se hospedan las delegaciones-, recorrieron las instalaciones y conversaron animadamente con los deportistas sobre cómo se preparan para disputar los juegos. Entre charla y charla hubo tiempo para tomar algo y lejos de pedir vajilla de cristal, la reina agarró un vasito de plástico naranja y brindó junto a los deportistas.
Fue una jornada muy distendida y amigable, donde no faltaron las fotos y algunas selfies. Incluso en un momento, la familia real se unió a los atletas y alentaron con ellos a pura sonrisa.
Otra cosa que no pasó inadvertida fueron los outfits de los miembros de la realeza. El rey Guillermo Alejandro se puso la campera anaranjada de la delegación con una chomba blanca, unos pantalones azules y unas zapatillas. ¿Y la reina? Fiel a su estilo, Zorreguieta causó furor con un vestido largo color naranja, un blazer azul y unas ballerinas haciendo juego. ¿El toque final? Una cartera tejida a crochet.
Por otra parte, las princesas también se lucieron con sus propios estilos. Amalia eligió un blazer azul, una remera naranja y unos jeans, para darle un toque de informalidad al look. Se calzó unas zapatillas y agregó un chal del color de su país y una cartera color nude. Por su lado, Alexia lució un conjunto de chaqueta y pantalón en color azul y una remera blanca.
El viernes, los reyes de los Países Bajos dijeron presente en la ceremonia inaugural del evento deportivo. Estuvieron sentados en la tribuna y lo cierto es que sus looks no pasaron inadvertidos. El rey Guillermo Alejandro lució formal con un traje azul oscuro con camisa blanca y corbata anaranjada. Por su parte, Máxima también llevó un conjunto de chaquete y pantalón azul oscuro con una remera blanca. Además, sumó accesorios del color del país: una campera, un chal y una cartera.
Fiel a su estilo, la reina nacida en la Argentina le sacó una sonrisa a más de uno con la forma en la que se comportó en la tribuna. En una de las fotos del evento, se pudo ver el momento en el que Máxima se levantó de su asiento junto a su marido y al advertir que alguien la saludaba a lo lejos, alzó el brazo, con el cual sostenía su celular, y lejos de ignorarlo, devolvió el gesto con alegría.
LA NACION